Vivir el día a día

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Mi Historia es la siguiente : Llevábamos 7 años intentando tener hijos y después de varias perdidas e ilusiones rotas no lo lográbamos,estábamos felices cuando nos informaron del positivo y de que eran 2 , en la semana 16 tuve una amenaza de aborto y era probable que uno de los embrioncitos no continuará después de casi 1 mes de reposo la amenaza se disipó y nuestros bebitos continuaron. El embarazo transcurría normal con nauseas, mareos y todos los demás síntomas, en la semana 23 tuvimos una ecografia y fueron sentimientos encontrados por que nos dijeron que era una niña y un niño eso nos puso súper felices pero también nos informaron que había una discordancia entre los 2 del 40% , nuestro médico nos informó que en caso de que algo pasara las decisiones se tomarían teniendo en cuenta al bebé más grande , eso nos dejo muy preocupados y pues seguimos confiando que las cosas saldrían bien hacia la semana 24 en un control de repente mi tensión empezó a elevarse después de un tiempo se regularizó pero en la noche volvio a subirse tuve que ir a urgencias , me realizaron exámenes y seguimiento por un día y afortunadamente no aparecio nada de preeclampsia me mandaron medicamentos para mantenerla regulada y reposo absoluto hasta finalizar el embarazo, estando en casa ya en la semana 28 empecé a tener un dolor muy fuerte en la boca del estomago pensé que era algo que había comido fuimos a urgencias me realizaron examenes y me dijeron que tenía preeclampsia severa y síndrome de hellp y que la única solución era desembarazarme fue un día terrible empece a llorar pensando en mis bebés, eran muy pequeños aún la niña pesaba según las ecografías 560g y el niño 1200g, inmediatamente me pusieron sonda me inyectaron el medicamento para la maduración pulmonar de los bebes y me hospitalizaron , solo esperaron 2 días para realizar la cesárea oraba mucho y pedía a Dios que todo saliera bien no sabíamos que podía pasar …
Bueno se llego el día de la cesárea a diferencia de muchas mamitas ese día fue muy duro para mí fue lleno de miedo de incertidumbre no la felicidad que tal vez todas sienten de poder ver a sus hijos. bajé a cesárea con 200 de tensión, me advirtieron que los bebés podrían no llorar entonces que no me asustará , pues les cuento que mis bebes lloraron! y fue una emoción indescriptible le dijeron al mundo aquí estamos y me dieron algo de tranquilidad primero nació mi niño pesando 1140 gr y después mi bebita con tan solo 540gr fue la que mas lloró nos sorprendió a todos. No pude bajar a verlos sino hasta 2 días después no me podía mover por que me mareaba si intentaba pararme.
Mi esposo estaba con los bebés y se que me ocultaba muchas cosas por que hasta después me enteré de que en esos días mi niña había pasado por 2 infecciones y salió adelante ella es un completo milagro una luchadora y una muestra de que Dios nos quiere demasiado. A mi niña tuvieron que cerrarle el ductus con medicamentos no soportó la leche de formula y a mi no me bajo leche sino después de 5 días de la cesárea. Vivimos el día a día en la UCI unos días eran buenos otros no tanto. Pero siempre confiábamos que todo iba a salir bien, sabíamos que Dios protegía a nuestros bebés. Cuando tuvimos algo de tranquilidad por que nuestros bebés estaban estables, nos sorprendieron con que el plan complementario al que yo estaba afiliada había decidido rechazar a los bebés por que estaban en la UCI y eran demasiado prematuros , eso implicaba que debían ser trasladados de clínica , ellos nacieron en la clínica de la mujer , fueron unos días terribles por que no sabíamos a donde los iban a remitir pero la clínica nos ayudó y decidió que cobraría como POS para que nuestros hijos terminaran allí el proceso, fue para nosotros un milagro veíamos como algo imposible que no se diera el traslado.
El niño duró 46 días en la UCI y la niña 72 días , aprendimos a vivir el día a día a no pensar en el día siguiente sino vivir ese momento , los vimos crecer y avanzar y celebrábamos cada avance, pasar de cuidado intensivo a intermedio , lograr los 1000 gr , eliminar las sondas, vimos como nuestros bebitos luchaban por seguir adelante y nos enseñaban a valorar cada instante.
Mis bebes ahora tienen 7 mesecitos ya están sin oxigeno la niña aun tiene controles pero son unos bebés sanos y muy fuertes.
Espero que si hay padres que están viviendo una situación parecida no se desanimen debemos darles fuerza a esos bebitos y animarlos , ellos son milagros de Dios y tienen unas ganas enormes de vivir, a la liga agradezco esta oportunidad de contar mi historia y les pido si pudieran revisar el tema de las afiliaciones a planes complementarios o medicinas prepagadas para los prematuros extremos por que se que muchas papitos pueden estar sufriendo por que sus hijos son rechazados.